El Gobierno de Ahmadineyad ha restringido a la mitad la capacidad de la banda ancha en Irán para evitar el envío de material audiovisual al exterior a través de la red. Internet se ha convertido en el principal instrumento de movilización de la oposición, que ha denunciado un fraude masivo en las elecciones presidenciales del pasado viernes, que otorgaron una victoria rotunda al presidente conservador Mahmud Ahmadineyad.El control de la información se disparó el pasado martes, después de que el Gobierno vetara a los medios extranjeros en las calles de la ciudad, por lo que internet se ha convertido en la única herramienta de comunicación con el exterior.Pese a las restricciones, los iraníes están acostumbrados a buscar servidores y proxy en el extranjero para tratar de eludir la censura gubernamental.