Ricardo Navarro ha vuelto a entrar en la sala defendiendo su inocencia. Con la misma actitud de ayer, muy tranquilo, Navarro ha escuchado cada una de las conclusiones de la acusación que le sitúan en el escenario del crimen. Las declaraciones de testigos, policías y forenses indican que fue víctima de malos tratos. La madre de la víctima ha tenido que escuchar los duros relatos. El abogado de Navarro le defiende y dice que no hay pruebas. El acusado sigue defendiendo su inocencia. El juicio ha quedado visto para sentencia. La fiscalía ha aumentado la pena y ahora pide 18 años de prisión porque considera que Navarro premedito el crimen.