Más gasto público y menos impuestos. Obama se aleja de Europa tras anunciar un nuevo plan de estímulo económico. Infraestructura para el futuro, ha dicho el presidente en la Casa Blanca. Se invertirá más en todo: en energías limpias, en I + D, en obras públicas. Y se bajarán los impuestos a las clases medias y a las pymes. Es el nuevo impulso de Estados Unidos para crear empleo y evitar la segunda recesión. En Europa el plan es el contrario: ajuste presupuestario y austeridad de hierro.