La jugada clave del partido no la protagonizaron ni Messi ni Cristiano Ronaldo ni Iniesta. Fue Victor Valdés, quien no supo qué hacer con el balón que le cedió Adriano ante la presión de Angel Di Maria. El resultado de la jugada fue un error monumental del portero que supuso el 3-2 y que supone un revulsivo para los madridistas ante el encuentro de vuelta. Sin embargo, Valdés no encontró ni un solo reproche por parte de sus compañeros. Vilanova afirmó que no no sólo no le dijo nada tras el encuentro sino que le anima a que siga jugando así en el futuro. Piqué y Alves también animaron a su guardameta al que calificaron de su "número 1". Por su parte, Iker Casillas, portero del Real Madrid y de la Selección española aseguró que sobre el terreno de juego nadie está exento de aciertos y desaciertos, pero que más allá de una acción puntual hay que valorar la línea regular de cada jugador y en este caso la de Valdés es excepcional.