Un juez de instrucción de madrid ha reabierto una denuncia por el robo de niños que implica de nuevo a Sor María. La afectada reconoció a Sor María Gómez Valvuena como la monja que le arrebató a su hija de las manos tras ponerla una inyección. Al despertar, Sor María le dijo que su hija había nacido con sindrome de down, y poco después le comunicó que había fallecido negándole la posibilidad de ver el cadáver.