Se nota el segundo día de huelga indefinida de basura en Madrid pero menos que ayer. Cada uno limpia su trocito y así la basura está amontonada y no esparcida. Parece que los trabajadores de la limpieza se han dado cuenta y han frenado algunos actos vandálicos del primer día. Pero las reivindicaciones siguen. Las concesionarias ofrecen reducir el número de despidos en 200 personas. Los sindicatos rechazan la oferta y exigen que no haya despidos. La negociación está en punto muerto. Mil cien despidos y una bajada de sueldo del 43 por ciento, eso se queda en 700 euros al mes con tres hijos y una hipoteca imposible de mantener. Y en la calle opiniones para todos los gustos. El ayuntamiento mantiene que el servicio está externalizado y se desentiende del problema.