En sólo unas horas, Cristina Fernández de Kischner pasará por el quirófano. Se someterá a una cirugía con la que los médicos pretenden drenar el hematoma que tiene en la cabeza. En principio la intervención no estaba prevista, pero, finalmente, el equipo médico así lo ha decidido.La atención de toda Argentina está puesta en el hospital Fundación Favaloro, donde está ingresada su presidenta, la que ingresaba con gafas oscuras y visiblemente desmejorada. Era su segundo ingreso en dos días.El primero fue el sábado. Aquí le descubrían un hematoma cercano al cerebro, y le recomendaron un mes de reposo. Pero un hormigueo en un brazo le ha llevado de vuelta al hospital a la presidenta argentina, donde han cambiado el tratamiento. Los médicos han decidido operarla hoy para drenarle ese hematomaPoco antes de conocerse la noticia, y como prevé la Constitución del país, el vicepresidente se hacía cargo del gobierno. Ya le sustituyó durante unos meses del año pasado. Pero ahora las elecciones están a la vuelta de la esquina, a menos de tres semanas, y Boudou está siendo investigado por enriquecimiento ilícito y tráfico de influencias.