En una tranquila calle de Riópar, un pequeño pueblo en la Sierra de Albacete, ayer los vecinos presenciaron la tragedia. Un niño de tres años y medio salió de casa y se metió en el coche de sus padres. Cerró la puerta y se quedó ahí, encerrado, hasta que lo encontraron. Los padres, que lo habían estado buscando por la casa, lo vieron ya inconsciente. Lo llevaron corriendo al centro de salud del pueblo, que está a sólo doscientos metros de la vivienda. Intentaron reanimarlo durante hora y media, pero fue en vano. El niño, perdió la vida. Se investiga la causa de su muerte, pero las primeras hipótesis apuntan a que pudo sufrir un golpe de calor. Los padres, naturales de Barcelona, pasaban unos días con su familia. Hoy el ayuntamiento de Riópar ha decretado dos días de luto. En la plaza del pueblo las banderas a media asta y un crespón negro recuerdan al pequeño.