Entre abrazos y alegría, la familia de Antonio celebra que ya está en España. También están contentos los vecinos de La Luisiana, en Sevilla, dónde padre e hijos son conocidos y queridos.Antonio, con diabetes, enfermo del corazón, y condenado a 4 años por tráfico de drogas, llevaba tiempo pidiendo su traslado a una cárcel de nuestro país. Lo ha conseguido. Ayer a mediodía llegó a España y fue atendido en el hospital de Algeciras. Por la tarde, ingresó en la prisión de la misma localidad. Atrás deja 18 meses viviendo en terribles condiciones casi sin comida o medicinas, como cuenta otro camionero que estuvo 200 días encerrado junto a él, y que fue declarado inocente.Ninguno de los dos creía que llegaran a salir de esa cárcel marroquí, pero lo lograron. Ahora la familia de Antonio quiere pedir el traslado a una cárcel de Sevilla, para que pueda estar aun más cerca de los suyos.