Pocas veces antes ha habido unas imágenes tan claras de un accidente y que permiten analizar lo que pudo pasar en la curva. Ricardo Insa es un ingeniero que diseño el trazado de vías del corredor del Mediterráneo. Apunta a una velocidad extrema del tren para este tipo de curva. El tren entraba a 190 km por hora en una curva muy cerrada, de tan sólo 500 metros de radio. Casi 5 veces más cerrada que el trayecto recomendado para una velocidad entorno a 200 kilómetros hora. La forma de descarrilar también indica un altísima velocidad. La maquina más pesada pasa la curva, es el primer vagón el que descarrila y arrastra a todo el tren. Si hubiera sido un descarrilamiento por una velocidad ligeramente excesiva, hubiera descarrilado de cola . El muro, aunque parezca lo contrario, pudo salvar muchas vidas. Ese mismo accidente en una curva en campo abierto habría provocado que todos los vagones salieran despedidos a gran velocidad, y posiblemente con muchas más víctimas mortales.