Las aguas vuelven a su cauce en Centroeuropa, tras un fin de semana de lluvias interminables. En Magdeburgo, esta pequeña ciudad del este de Alemania, 23.000 personas fueron evacuadas y el nivel del Elba llegó a casi siete metros y medio, cinco más de lo normal, aunque hoy ha descendido ya hasta 7,13. Las inundaciones han dejado docenas de muertos allí, y también en Austria, Eslovaquia, Polonia y Hungría. Allí los equipos de emergencia trabajaron durante la noche para reforzar los diques ante la impresionante subida del Danubio. Pero, para alivio de los ciudadanos, la situación está bajo control y las aguas han empezado a volver a su nivel, según el primer ministro, aunque se mantiene la alerta en las zonas de peligro. Más de 1.300 personas han sido evacuadas en el país y 44 carreteras han quedado cortadas como consecuencia de las inundaciones.