La investigación sigue abierta en Cartagena donde ayer fueron detenidos seis policías por su presunta relación con la muerte de un hombre el pasado mes de marzo. Durante la investigación se colocaron micrófonos ocultos en los coches patrulla que utilizaban los seis agentes detenidos. Eran los principales sospechosos de la muerte de Diego. Desapareció hace seis meses y la última vez que lo vieron fue subido a un coche policial. Su hermano denunció su desaparición. Tenía problemas con las drogas y los vecinos lo acusaban de haber robado unas bicicletas. Al parecer, tras una llamada, los agentes acudieron y se excedieron con él. Después se deshicieron el cuerpo arrojándolo al mar. La autopsia desveló que había muerto por los golpes sufridos en la cabeza de al menos cuatro personas distintas. Hace una semana los seis policías descubrieron los micrófonos ocultos en sus coches y lo denunciaron, pero ya era tarde, sus conversaciones les habían delatado.