El Ayuntamiento ya no sabía qué hacer, hasta que se le ocurrió esta idea. Sustituir los candados, por los selfies. Y es que los puentes de París empiezan a ceder. Una iniciativa movida a través de las redes sociales. Bajo el hashtag "amorsincandados", decenas de personas ya han colgado su foto en Twitter. Y como se menciona en el eslogan, los puentes de París no pueden aguantar tanto amor. Así que en vez de poner un candado y lanzar la llave al Sena, mejor esto: una foto, que no pesa, para inmortalizar el momento. Pero una cosa queda clara. Con o sin candado, París, ciudad del amor.