Tras 51 dias de huelga, con sus 51 noches, ésta ha sido la peor. Los nueve contenedores que han ardido esta noche, en diferentes puntos de Lugo, han dejado ennegrecidas las fachadas y los cristales requebrajados. Los vecinos no pueden más. Aunque la situación de limpieza ha mejorado, el municipio todavía suma alrededor de 50 puntos de alerta sanitaria. Desesperados ante un problema que se eterniza en el tiempo, los vecinos han pedido que dejen de cobrarles la tasa de recogida de basuras e, incluso, han manifestado estar dispuestos a limpiar ellos mismos. Hoy se cumple un nuevo plazo entre Urbaser y los trabajadores, pero, de momento, siguen sin llegar a un acuerdo.