Los circos en Cataluña pueden tener tres pistas y carromatos, trapecistas y payasos, o lanzador de cuchillos, pero no animales. Lo habían prohibido ya en cien ayuntamientos y hoy el veto inicia su camino para extenderse por todo el territorio. Aseguran que espectáculos como éstos y las condiciones en las que viven, provocan en los animales estados neuróticos. Aún así, el Parlamento catalán no descarta excluir del veto animales domésticos como caballos o perros.