En 2007 Sergi Xabier entró en el vagón de tren hablando por teléfono, se acercó a una chica ecuatoriana que estaba sentada y comienó a insultarla. De los insultos pasó a la AGRESION. Le dio un manotazo en la cara, le pellizcó el pecho y le propinó una patada en al hombro. Entonces, Sergi Xavier tenia 21 años, su víctima 15. El ataque racista fue grabado por al cámaras de seguridad y levantó polémica. Sergi Xavier fue condenado por un delito contra la integridad moral a 8 meses de cárcel. Como la pena es inferior a 2 años y no tenia antecedentes, el juez lo cambió por cursos y trabajos en beneficio de la comunidad. Pero nunca se ha presentado. Tras 7 años, el juez ha revocado su libertad condicional y el martes ingresaba en la Modelo de Barcelona.El abogado penalista Jordi Tirvio comenta que en el momento en el que se establece que los trabajos y cursos impuestos no se están cumpliendo se acaba la posibilidad de sustituir la pena de cárcel y llega el momento de decretar el ingreso en prisión. En estos años, incluso su abuela, con quien se crió, le ha acabado denunciando. Sergi Xavier tampoco ha pagado los 6000 euros de que debe a la joven por los daños morales que le causó.