La tensión se palpaba en el ambiente durante el debate de las reformas económicas en Italia, pero la chispa saltó cuando el portavoz del FLI, Gianfranco Fino, habló con sarcasmo de la esposa del líder de la Liga Norte, Umberto Bossi, que se ha jubilado con solo 39 años. Fue entonces cuando varios diputados saltaron desde la tribuna a las bancas y se inició la pelea.