Las protestas en la calle tras la decisión de la juez Carmen Lamela, fueron inmediatas. Al grito de "No estáis solos", y "Puigdemont president" unas 20.000 personas, según la Guardia Urbana, se manifestaban a las puertas del Parlament para pedir la libertad para los ex consellers encarcelados. Una concentración a la que se han sumado otras en sonoras caceroladas que se han escuchado en varios municipios. Los independentistas se hacen oír también con gritos y con pancartas. Parece que la respuesta no se limita a las calles, también quieren que quede demostrado el 21 de diciembre. Pretenden que esto sirva de impulso para hacerse más fuertes en las autonómicas y de este modo formar un frente electoral con el que luchar contra los constitucionalistas. Protestas frente al Parlament, o en el Palau de la Generalitat, pero también en diferentes municipios catalanes. Miles de personas han manifestado su rechazo también en Tarrasa o Gerona, donde han cancelado los conciertos que tenían previstos como muestra de apoyo.
-Redacción-