Ya son 31 las víctimas mortales por culpa de las llamas que avanzan sin control en Portugal. Además, 50 personas han resultado heridas. Con 400 incendios activos en el centro y el norte del país, algunas de las víctimas han encontrado la muerte en carretera intentando huir o tratando de rescatar a sus seres queridos. El Gobierno portugués ha pedido ayuda a la comunidad internacional y los bomberos, más de la mitad voluntarios, se la piden a los vecinos.
-Redacción-