Siria continúa detrás del sueño de meterse en un Mundial de fútbol. Tras el primer encuentro de repesca ante Australia, en el que empató a uno, las expectativas de sellar el billete a Rusia se han disparado. A pesar de ser un país sumido en una guerra interminable, su selección está ahora a tres partidos de hacer historia y entrar en la máxima competición de selecciones del mundo. El siguiente partido, también contra Australia, se disputará en Sidney y el ganador se enfrentará al cuarto clasificado de la CONCACAF, que en estos momentos es Estados Unidos.