Es una de las ciudades más hermosas del mundo y, aunque parezca mentira, también una de las más contaminadas...Y la solución para frenar esta plaga ambiental se encuentra en el interior de este tubo de aspecto extraterrestre. Son microalgas, contenidas en una columna de agua, y diseñadas para hacer el trabajo de al menos 100 árboles. Cuando se las expone a luz artificial, se desencadena la fotosíntesis: captan dióxido de carbono y liberan oxígeno. Ya hay instalados prototipos en varios puntos de París, allí la mitad de sus habitantes padecen la contaminación atmosférica. Humos y gases que en los últimos años han acortado la esperanza de vida de los parisinos en al menos 15 meses. Todo en un país, Francia, donde cada año mueren 48.000 personas, víctimas de la contaminación.