Manifestación de la Diada. Un minuto de silencio, en recuerdo de las víctimas del atentado de Barcelona y Cambrils, ha precedido el apogeo independentista. Eran cientos de miles. Nada ha roto el mutismo. Luego sí, gritos de independencia. Los mensajes de siempre. Quizás más contundentes, marcados por la inminencia del referéndum. Y de los primeros damnificados por el procès. Entre ellos, Artur Mas. El Tribunal de Cuentas le exige que pague 5 millones de euros por el 9N y un grupo de voluntarios se ha encargado de recoger donativos para sufragar las multas. Ha sido una manifestación que los más optimistas se muestran convencidos de que no habrá que repetirla si hay urnas el 1 de octubre. 
-Redacción-