En pleno siglo XXI existe en España una Fundación, la Fundación Franco, que pretende utilizar el Pazo de Meirás para elogiar, textualmente, la "grandeza del dictador". Esa fundación sigue siendo responsable de las visitas a la que fue residencia de verano de Franco y su familia. Responsables políticos de distinto signo y miembros de la Memoria Histórica lo consideran algo intolerable, una ofensa en toda regla.
-Redacción-