Las vacaciones son sinónimo de descansar, relajarse, comer y dormir, pero el sonido del whatsapp trae de cabeza a los españoles incluso en los días de descanso. El móvil se ha convertido en un imprescindible junto a la toalla y el bañador para ir a la playa, y aunque algunos ven fácil la solución dejándolo en casa, no lo es tanto para más del 60% de los españoles que se ve incapaz de apagarlo. Móviles en el chiringuito, en la hamaca y en la orilla que impiden desconectar.
-Redacción-