China ha lanzado con éxito su primer carguero espacial, la nave no tripulada 'Tianzhou 1'. Ha despegado desde el Centro Espacial de Wenchang y la duración de la misión es de cinco meses. Un gran paso estratégico para conseguir tener presencia permanentemente en el espacio; un objetivo que está previsto que concluya en 2022. A los diez minutos de despegar, el carguero se ha separado del cohete que lo llevaba y ha entrado en la órbita prevista para acoplarse con el laboratorio espacial 'Tiangong 2'.