Termina en Madrid, con gran afluencia de visitantes y un repunte en la ventas, otra edición de la Feria de Arte Contemporáneo. Nos hemos fijado en aquellas obras que por su aparente simpleza o porque a primera vista puedan resultar extrañas  nos llevan a preguntarnos si son realmente arte. Los autores conocen bien lo que quieren transmitir pero no es fácil captarlo en las miradas inexpertas. Obras proyectadas, interactivas, efímeras y objetos que nos confunden en la feria y nos vamos sin saber si son o no arte.
-Redacción-