A golpe de mazo intentan romper la puerta. No consiguen abrirla, así que entran por el hueco del cristal. Tardan en torno a cinco minutos. Van a por las motos pequeñas, fáciles de colocar en el mercado y más fáciles de robar. Huyen con un botín de 20.000 euros. No es el único establecimiento que ha sufrido un robo como éste en el último mes. En la provincia de Sevilla ha sucedido al menos cuatro veces en pocos días. En otro caso golpean la puerta con un coche robado hasta tres veces. A la tercera consiguen entrar. Cuando llegan los dueños ya es tarde. Se llevan seis motos y accesorios valorados en 90.000 euros. Los propietarios de los establecimientos creen que todos estos robos están relacionados. La Policía y la Guardia Civil investigan los hechos.
-Redacción-