Pedro Luis Gallego, conocido como "el violador del ascensor" es también el  "violador de La Paz". La Fiscalía de Madrid solicita para él 96 años de cárcel por agredir sexualmente a dos mujeres e intentarlo con otras dos entre los años 2016 y 2017 en los alrededores del hospital público madrileño. Se le imputan 11 delitos por detención ilegal, agresión sexual continuada, lesiones y robo con violencia. Gallego actuaba según la acusación pública con mucha violencia: amenazaba con una pistola a las mujeres a las que asaltaba, de noche y en lugares solitarios, como los alrededorres del hosptal; las golpeaba. Dos lograron huir de su captor, no así otras dos jovenes. El acusado les ataó con bridas las manos a la espalda, les tapó los ojos y las trasladó a tumbadas en el suelo de los asientos traseros del coche hasta su casa en Segovia. Las violó de forma reiterada hasta que decidió abandonarlas en la calle de vuelta a Madrid, después de haberlas limpiado para evitar que quedaran vestigios de su ADN en su cuerpo. El violador del ascensor fue condenado en 1994 por 18 agresiones sexuales y dos asesinatos. Quedó en libertad con la Doctrina Parot, 9 años antes de cumplir el máximo previsto de la pena, sin haber aceptado nunca hacer cursos de tratamiento para agresores sexuales. Se sentará en el banquillo de los acusados el próximo 3 de octubre.