La huelga de hambre iniciada por el expresidente de la ANC y diputado de JxCat, Jordi Sànchez, y el exconseller y diputado de JxCat Jordi Turull, preocupa al presidente del Gobierno. "Es evidente que no es una buena noticia", ha admitido Pedro Sánchez en rueda de prensa desde Buenos Aires al término de la cumbre del G-20.