Tratando de cruzar este río, que separa a México de Guatemala ha muerto otro migrante hondureño. Ya son tres las personas fallecidas en las tres caravanas que desde mediados de mes se pusieron en marcha hacia Estados Unidos.
Allí no son bien recibidos. El presidente Trump ha calificado de invasión el movimiento migratorio y aumenta el tono de sus amenazas. "No permitiremos el paso a ningún grupo de manera ielgal o insegura", dice el jefe de  aduanas y proteccion fronetriza, Kevin Mc Aleenan.
Se habla de desplegar cinco mil militares. El secretario de Defensa ha autorizado el uso de las armas. "De hecho están armados", advierte el comandante de la Zona Norte de EE.UU.
En México están intentado acoger a los que son rechazados en la frontera. "El Gobierno ha dispuesto siete albergues y por ahora, hemos usado uno", asegura el comisionado mexicano.
Para muchos regresar a Honduras es impensable. "No tenemos dienro para pagar a lso coyotes y por eso nos unimos a la caravana", dice esta mujer. La caravana es su única opción, porque no pueden pagar a las mafias que cobran por pasarles a Estados Unidos.