Los niños expuestos al tabaco en casa sufren más enfermedades e ingresos hospitalarios. Según un estudio elaborado por SEPAR, los hijos de fumadores son fumadores pasivos con un consumo anual de nicotina equivalente a fumar entre 60 y 150 cigarros. Si la mujer fuma cuando está embarazada (una de cada cinco fuma) también los bebés sufren más enfermedades respiratorias. El tabaco es especialemente dañino para los diminutos pulmones de los niños menores de 3 años.