La relación de Hernán Montenegro con la Generación Dorada es el tema de este video. Cuenta el invitado que charlando con Manu Ginobili, el de San Antonio Spurs le dijo al Loco que había abierto una puerta. Montenegro le aceptó que él había abierto la puerta pero al mismo tiempo le dijo que ellos habían abierto un portón.\n\nHabla de Pablo Prigioni y su paso por Europa para llegar a la NBA con 35 años, un caso histórico para el basquet yanqui. Europa le cambió la cabeza a nuestros jugadores, les enseñó lo que en Argentina no pueden aprender. Manu Ginóbili y el Chapu Nocioni recorrieron el mismo camino: primero Europa y después la NBA.\n\nSentencia Montenegro: "Si tenemos una gran problemática en Argentina es el tema de los dirigentes. La dirigencia argentina es lo peor del deporte argentino. Lo mejor del deporte argentino son los deportistas".\n\nAl Rugby le pasó lo mismo. Los jugadores tuvieron que ir a jugar a Europa y Oceanía para lograr crecer y aprender todo lo que acá en Argentina no podían encontrar. El Loco Montenegro cuenta su charla con Serafín Dengra, un pilar habilidoso que jugó en Los Pumas. Explotó cuando se fue a jugar afuera como profesional. Cuando volvía a la Argentina convocado por Los Pumas y se paraba al lado de los jugadores locales, parecía uno de los All Blacks. \n\nEra un pilar distinto que corría y atacaba con la pelota en la mano. Algo totalmente diferente para esa época en donde los pilares eran gordos enormes que empujaban pero no se podían mover. Serafin Dengra rompió los cánones del rugby. Sobre el tema de la profesionalidad, Hernan Montenegro prefiere no opinar: "Yo en eso no entro porque es una boludez para viejos chotos fumando pipa en el CASI". Clarita su posición.