La dureza de la situación actual, tras más de 40 días de confinamiento y con miles de víctimas mortales causadas por el nuevo coronavirus, ha generado imágenes impactantes que no suelen verse en público. Son varias ya las personalidades políticas que han mostrado sus emociones más profundas al describir la. Crudeza de los datos. Políticos como la consellera de Sanitat, Alba Vergés, tras anunciar el cierre de Igualada y sus alrededores; el director del Servicio de Salud de Aragón, Javier Marión; o como la consejera de Sanidad de Castilla y León, la doctora Verónica Casado.
Las lágrimas de Casado, al recordar este lunes a sus compañeros sanitarios que han muerto en las últimas semanas tras contagiarse del coronavirus, han sido una especie de válvula de escape y un resumen emocional de lo que ha vivido en las últimas semanas, al frente de la crisis sanitaria por la COVID-19.