Las voces del cine y de las series de televisión vuelven a subir el volumen. La crisis sanitaria del coronavirus ha obligado a paralizar la industria del doblaje, un parón que ha tenido consecuencias directas en los productos que hemos consumido durante los meses de confinamiento.
Algunas de nuestras series o programas favoritos han quedado mudos debido a la imposibilidad de continuar con la rutina habitual de trabajo en este sector.
Ahora que poco a poco comenzamos a retomar la normalidad, los estudios de grabación han reabierto sus puertas cumpliendo con los protocolos de seguridad e higiene.
De hecho, el COVID-19 ha obligado a modificar la forma de trabajar de estos actores.
Sin embargo, aunque esta pandemia cambiará las historias de la cartelera, hay algo que será irreemplazable, las emociones que nos transmitan las voces de los protagonistas de la gran pantalla