Un nutrido y enfervorizado grupo de manifestantes cubanos protestaron airadamente este 12 de julio de 2021 ante la embajada castrista en Madrid, exigiendo el fin de la represión en la isla.
Rocío Monasterio, presidenta de VOX en Madrid, arengo a los asistentes, reiterando que no van a parar hasta acabar con el régimen comunista.
Horas antes de la concentración ante la embajada, otros grupos de cubanos pidieron "auxilio" y apoyo internacional a las puertas del Congreso de los Diputados español, donde protestaron contra la represión policial desatada tras las manifestaciones de este fin de semana en diversas ciudades cubanas.
"Patria y vida", "los cubanos queremos vivir en democracia", o "este pueblo no se calla hasta que los dictadores se vayan", son algunos de los lemas que corearon los manifestantes, que reivindicaron su "apoyo incondicional" a las "protestas pacíficas" en la isla caribeña.
La manifestación, a la que también acudieron algunos diputados de diversas fuerzas políticas españolas, se trasladó después a la céntrica Puerta del Sol, epicentro de la capital, donde se reunieron decenas de participantes que ondeaban banderas cubanas y portaban pancartas en apoyo a los detenidos en las protestas.
El pasado domingo miles de cubanos salieron a las calles en varias ciudades de la isla para protestar contra el Gobierno, en medio de la grave crisis económica y sanitaria que vive el país, y como respuesta, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, conminó a sus partidarios a salir a las calles a enfrentar a los manifestantes.
El presidente de Prisioner Defenders, la plataforma que convocó la manifestación, Javier Larrondo, declaró:
"las palabras de Díaz-Canel son guerracivilistas; es capaz de generar luchas entre hermanos con tal de mantenerse en el poder".
Una portavoz del Consejo para la Transición Democrática, organización que aglutina varios grupos opositores cubanos, Elena Larrinaga, subrayó que el presidente cubano "ha incurrido en un delito moral de provocación a la violencia", y añadió que "está inhabilitado para su cargo por intentar secuestrar la soberanía del pueblo".
El eurodiputado conservador español de origen venezolano, Leopoldo López Gil, denunció que "el servicio de un buen Gobierno no es reprimir a su gente, sino darles prosperidad, paz y concordia. Después de 62 años todavía hay hambre de libertad en Cuba", concluyó.
Por otra parte, el presidente Acciones para la Democracia, Lázaro Mireles, pidió al Gobierno español "que no mire para otro lado", y animó a la comunidad internacional a denunciar "los abusos del régimen cubano contra su pueblo", mientras hacía suyo el cántico coreado por los manifestantes:
"España, escucha, Cuba está en la lucha".