Un niño de 10 años de edad fue atacado cuando se dirigía a la tienda de su localidad. Sujetos desconocidos lo habrían rociado con un líquido inflamable y luego le prendieron fuego. Nicolás Pablo, padre de la víctima pide a las autoridades investigar el hecho, ya que su hijo ni ellos tienen problemas con nadie para ser agredidos de esa manera.
El menor fue trasladado a la emergencia del hospital Nacional de Chimaltenango con quemaduras de primer y segundo grado en el 75 por ciento de su cuerpo.