La chica tiene los ovarios bien puestos.

Liusivaya, una joven rusa afincada desde hace algún tiempo en España, ha encontrado un inesperado filón en los vídeos que sube a las redes sociales, especialmente en Twitter e Instagram, en los que no deja sanos a los socios del Gobierno socialcomunista.

Llegó a Madrid en el año 2012 y logró el título de licenciada en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense, lo que sin duda ha resultado esencial a la hora de expresarse en sus vídeos y justificar todos y cada uno de los palos que propina a Pedro Sánchez y sus compinches.

Esta influencer se ha convertido en viral en las últimas horas como consecuencia del último vídeo que ha subido a la plataforma de vídeo Youtube.

En él, ha querido analizar las ayudas que el Gobierno de Pedro Sánchez ha anunciado para los afectados por el volcán de La Palma y que están valoradas en 10,5 millones de euros, 5 de ellos para ayudas para la adquisición de enseres y 5,5 para adquirir viviendas.

El vídeo ya ha tenido mucha repercusión en redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea. En él, Liusivaya defiende que el Gobierno de España "se ha reído de Canarias y en particular de los palmeros".

Para ilustrar lo que intenta decir con su tono irónico, hace mención de diferentes ayudas que el Gobierno de Pedro Sánchez ha ofrecido en otros aspectos en comparación con la erupción de Cumbre Vieja.

En el vídeo viral de Youtube Liusivaya ha hecho el cálculo del dinero que le correspondería a cada canario que ha perdido su vivienda por la erupción del volcán de La Palma, y ha constatado que serían 15.120 euros. De esta cifra, ha explicado que no es suficiente como para poder reconstruir la casa de una persona. Sin embargo, ha ido más lejos y lo ha querido comparar con otras ayudas.

Ha hecho mención de los 30 millones que se dieron a Marruecos para gestionar la crisis de inmigrantes, 53 millones de euros a una aerolínea conectada con el chavismo.

También ha puesto sobre el tapete los 50 millones de euros a Íñigo Errejón y los 50 millones que se le dieron para "estudiar la viabilidad de trabajar cuatro días a la semana", así como los 123 millones de euros que el Gobierno de España gasta en publicidad institucional.