Londres (R. Unido), 21 ene (EFE).- (Imagen: Enrique Rubio) El primer ministro británico, el conservador Boris Johnson, sigue en la cuerda floja ante la rebelión de una facción de los diputados de su propio partido, que le acusan de extorsión y amenazan con convocar una moción de confianza interna.