Bruselas (Bélgica), 13 feb (EFE).- (Imagen: Javier Albisu) A orillas del río Senne a su paso por Bruselas duerme una revolución. Descansa silente junto a un canal, al abrigo de una vieja fábrica de coches sembrada ahora de albañiles y operarios que preparan la corteza de uno de los proyectos artísticos más sugerentes de Europa.