Radiotelevisión Española, que lleva 33 años siendo testigo de lo que ocurre en Castilla-La Mancha, ha inaugurado este jueves sus nuevas instalaciones en Toledo, tras una profunda reforma. Estas obras, que han servido para unificar los servicios de televisión y radio, han supuesto una mejora en la distribución y el aspecto del edificio, así como la incorporación de materiales tecnológicos de mayor calidad y adaptados a la digitalización.