Ascienden a más de 106 los fallecidos y 10 personas desaparecidas por fuertes lluvias y deslizamientos de tierra en la periferia de Recife, capital del estado de Pernambuco, al noreste de Brasil. Una situación recurrente en varias regiones del país a pesar que el Gobierno de Jair Bolsonaro redujo un 45 por ciento el presupuesto de la gestión de prevención para evitar desastres naturales. teleSUR