Es lo que se llama agarrarse a un clavo ardiendo.
Pablo Iglesias, desde La Base, se lanzó a tumba abierta contra los medios de comunicación que no le bailan el agua.
En concreto, al fundador de Unidas Podemos le molestó que varios periodistas criticasen la entrada en bucle de Irene Montero cuando esta, a cada pregunta sobre por qué no pudo contestar en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre el asalto a la valla de Melilla, se limitaba a decir que de ella siempre se conocerÃa su opinión.
De hecho, cierto es, que en ese canutazo sà acaba dando, a la fuerza, algunas explicaciones. Pero responde después de que se le haga la pregunta no menos de media docena de veces.
Iglesias, que ya venÃa con la tesis editorial preparada de casa, se dedicó a repartir estopa entre los medios y más en concreto contra tres comunicadores de tronÃo: Susanna Griso, JoaquÃn Prat y Carlos Alsina, a los que llamó "basura" y hasta alentó contra ellos la violencia mediática.