Lo que empezó con cinco prótesis de brazo en el Valle del Rift terminó siendo un proyecto: Ayúdame3D. Impulsado por el ingeniero español Guillermo Martínez, gracias al empleo de la impresión en 3D comenzó a aplicar esta tecnología de una manera solidaria. Hoy Ayúdame3D puede ofrecer estos dispositivos, fabricados de forma colaborativa a través de comunidades makers de propietarios de impresoras 3D, a cualquier persona del mundo.
Un ecosistema en el que intervienen muchos actores que tienen como objetivo compartir conocimiento y colaborar para resolver problemas. Cientos de expertos en impresión 3D que desde sus casas fabrican y entregan cualquier prótesis de brazo allá donde se necesite.
En la actualidad, Ayúdame3D es una entidad de referencia en investigación, desarrollo y distribución de dispositivos de ayuda fabricados mediante impresión 3D en todo el mundo. Un proyecto con el que se llega a más de 150 personas cada año y que está presente en más de 50 países.
Ayúdame3D tiene un fuerte componente social. Aquí la inclusividad, accesibilidad, igualdad y el empoderamiento son el motor de sus iniciativas. De esta manera, se fomenta el valor social de la tecnología con el fin de ayudar a colectivos vulnerables, sin importar el lugar en el que se encuentren, no hay fronteras.