Si un gobierno ordena cuarentenas por el cambio climático, es probable que esto no tenga un impacto significativo en la humanidad en sí misma, sino más bien en la economía y la sociedad de la región afectada por la cuarentena. Las cuarentenas pueden tener un impacto económico negativo, ya que pueden interrumpir el comercio y la producción de bienes y servicios. Además, pueden afectar a la libertad de movimiento de las personas y pueden provocar tensiones sociales. Por lo tanto, es importante que los gobiernos tomen decisiones sobre la implementación de cuarentenas de manera responsable y basándose en evaluaciones científicas y médicas rigurosas.