La capilla ardiente por el exsecretario general de UGT Nicolás Redondo, fallecido la pasada noche, se ha instalado en el salón de actos de la sede de UGT, en Madrid.
Hasta allí se han desplazado numeras personas para dar el último adiós al histórico líder sindicalista. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, que ha visitado la capilla ardiente, ha querido recordar a Redondo como "una de las huellas fundamentales de la UGT y del sindicalismo de este país".
También ha querido despedirse de él, Cándido Méndez. El que fuera también secretario general de UGT ha lamentado que el fallecimiento de Redondo deja "un hueco irremplazable en UGT".
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, también ha asistido a este último adiós al histórico líder de UGT.