Más de 1.000 personas debieron abandonar sus casas y otras 766 se quedaron sin hogar, tras las fuertes lluvias registradas en el estado brasileño de São Paulo. Las autoridades contabilizan alrededor de 40 personas desaparecidas, entretanto, el Gobierno de Lula da Silva, trabaja en conjunto con autoridades locales para ayudar a los afectados. teleSUR