"Tengo mucho miedo. Son imágenes que no se te borran, son fuertísimas, te ves bañada en sangre y piensas que ya se acabó todo para ti": es la declaración de una mujer que pudo haber muerto a manos de su expareja. Xóchitl recibió 12 navajazos en su cuerpo y un disparo que destrozó sus intestinos.