Hacer ciertas cosas antes de empezar el día puede hacernos más felices, más sanos y aumentar nuestra productividad.
Asegúrate de que dormir bien sea una prioridad, se recomienda que los adultos duerman al menos siete horas por noche.
Dormir bien puede reducir los niveles de estrés, aumentar nuestra capacidad de atención y también mejorar nuestra memoria.
Empezar el día con una actividad física intensa puede ayudar a reducir la ansiedad e incluso está relacionado con un mayor éxito profesional.
Tomar una ducha fría a primera hora de la mañana puede contribuir al bienestar físico al mejorar el sistema circulatorio.
Los estudios han demostrado que las duchas frías pueden incluso ayudar a mejorar los síntomas de la depresión y mejorar el estado de ánimo.
Otra cosa estupenda para impulsar tu productividad por la mañana es consumir contenidos motivadores.
Dedicar 15 minutos a leer o escuchar material informativo y edificante puede ponerte en el estado de ánimo adecuado para el éxito.
Para poner tu día en perspectiva, reflexiona sobre tus objetivos a corto y largo plazo cuando empieces cada mañana.