La imagen ya es indeleble.
Por mucho que el presidente del Gobierno socialcomunista, Pedro Sánchez, quisiera desviar el tiro, a nadie se le escapó el hecho de que este se ausentase de la votación para la toma en consideración de iniciar el proceso de reforma de la ley del solo sí es sí.
De hecho, pese a que ahora los parlamentarios tienen la oportunidad de ejercer su derecho al voto de manera telemática, al inquilino de La Moncloa le ocuparon otras cuestiones y, como bien dice este 9 de marzo de 2023 Carlos Alsina en 'Más de Uno' (Onda Cero), no tuvo ni tiempo de abrir el ordenador.
El periodista de la emisora de Atresmedia fue directo al grano:
El día da para lo que da. Uno tiene el tiempo que tiene. Si no da para más, pues no da. Si al presidente del Gobierno, con la agenda apretadísima que desde luego tiene… ¿Cómo tiene la agenda el presidente, ministra portavoz?, usted que le trata, díganos…eso es, sin exagerar, eh, y no porque sea el jefe: no ha habido presidente con una agenda intensa y reformista como la de éste, ni Felipe cuando estaba poniendo España en el mapa de Europa y dándole la vuelta al país tenía una dedicación semejante.
Alsina le dio un consejo a Sánchez si ve que él no puede dedicarse 'full time' a la actividad parlamentaria:
Por eso, si no le queda un minuto libre para votar las iniciativas de su propio grupo en el Congreso igual lo mas sano sería, para no estresarse, renunciar al escaño y dejárselo a otro que pueda dedicarle el tiempo que un escaño merece.
No ha dado ni media explicación Pedro Sánchez de su escaqueo parlamentario del martes. Ni se personó en el Congreso -a diez minutos en coche oficial desde la Moncloa- ni abrió el ordenador en su despacho para votar telemáticamente. Se votaba nada menos que la proposición que presentó su grupo, a instancias del propio presidente, para rectificar una ley que permite que haya penas más bajas para agresores sexuales que con la ley que había antes.
Critica que se haya escondido Sánchez ante la reforma de una ley de la que él mismo dijo sentirse muy orgulloso de la misma:
Ha hecho de esta reforma su partido el asunto principal, y más urgente, del debate político de las cinco últimas semanas. Pero Sánchez no sólo estuvo el martes desaparecido sino que ayer no creyó necesario explicar por qué. Dejó que fuera su equipo el que despejara el balón con la excusa peregrina de que tenía trabajo pendiente. Y una agenda que ¡madre mía!, no le deja un minuto libre.
Entre jugar a la petanca en Coslada, subirse a la bici eléctrica en Valladolid, visitar en su casa a jóvenes de Parla, acompañar a bomberos forestales en Ávila es natural que no le quede un momento para cumplir con su deber de votar en el Parlamento. Los vídeos de autopromoción humanizante deben de parecerle más necesarios que la toma en consideración del remiendo legislativo al sólo sí.