§ Alojaban a los migrantes en inmuebles ubicados en la isla de Gran Canaria, en circunstancias no aptas para ser habitados y sin las mínimas condiciones de salubridad, llegando a obtener unos beneficios superiores a los 250.000 euros
§ Los implicados recibían información de otras organizaciones dedicadas al tráfico de personas sobre las salidas de embarcaciones desde Marruecos